miércoles, 11 de julio de 2007

Los hermanos

(Atahualpa Yupanqui)


Yo tengo tantos hermanos,
que no los puedo contar,
en el valle, la montaña,
en la pampa y en el mar.

Cada cual con sus trabajos,
con sus sueños cada cual,
con la esperanza delante,
con los recuerdos, detrás.

Yo tengo tantos hermanos,
que no los puedo contar.

Gente de mano caliente
por eso de la amistad,
con un rezo pa’ rezarlo,
con un llanto pa’ llorar.*

Con un horizonte abierto,
que siempre está más allá,
y esa fuerza pa’ buscarlo
con tesón y voluntad.

Cuando parece más cerca
es cuando se aleja más.
Yo tengo tantos hermanos,
que no los puedo contar.

Y así seguimos andando
curtidos de soledad,
nos perdemos por el mundo,
nos volvemos a encontrar.

Y así nos reconocemos
por el lejano mirar,
por las coplas que mordemos,
semillas de inmensidad.

Y así seguimos andando
curtidos de soledad,
y en nosotros nuestros muertos
pa’ que naide quede atrás.

Yo tengo tantos hermanos,

que no los puedo contar,

y una novia muy hermosa

que se llama libertad.




2 comentarios:

Histórica dijo...

realmente tu vida, Lobo, y la de otros callejeros independientes que he conocido y he querido (algunos recordarán a Pocho y Asamblea, de la facu de artes, que también se llamaban Ester y Juan Carlos) es diez mil veces más hermosa que la de muchos, no digo ya perros, sino gente. Vos y ellos han logrado la esencia de su ser libre de animal urbano. Tu antítesis son los perros con moños y demás pelotudeces, y sus dueños/as, tan histéricos como sus mascotas. Felicidades por el blog.

Mariana dijo...

NO LOBO NO, TU BLOG ES DIFERENTE AL MÍO, NO MEJOR, DIFERENTE:

http://retratosuobsesion.blogspot.com